Futuro TIC: Oscar González y la importancia de contar con políticas de largo y mediano plazo
Entrevista a Oscar González (foto), consultor y asesor en regulación de telecomunicaciones, tecnologías de la información y las comunicaciones y economía digital.
La crisis que supuso el desarrollo de la pandemia del Covid-19 obligó a los países de la región a tomar medidas de emergencia pensadas en atender las necesidades de los sectores más vulnerables. La importancia de estas medidas, así como el rol de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) en la post pandemia, son debates necesarios para analizar en el contexto actual.
Sobre estos temas, Oscar González, quien se desempeña como consultor y asesor en regulación de telecomunicaciones, tecnologías de la información y las comunicaciones y economía digital, formuló interesantes declaraciones.
¿Cuáles son los cambios regulatorios más importantes que han realizado los gobiernos con respecto a mejorar el acceso a internet para hacer frente a la pandemia?
La pandemia nos permitió poner la cuestión de la conectividad y de las TIC en el centro de la agenda, en todos los países en mayor o menor medida se adoptaron decisiones para procurar facilitar el acceso y para atender la cuestión de la asequibilidad. Desde medidas vinculadas a la falta de pago de los servicios, hasta la formulación de planes más económicos para algunos sectores de la población.
También destacaría iniciativas que tuvieron que ver con aspectos más estructurales de la industria. Como facilitar a los operadores el despliegue de redes o generar incentivos para facilitar el despliegue de infraestructura.
Hubo un foco inicial en procurar garantizar que la ciudadanía pueda mantenerse conectada y con acceso, pero el en ámbito más especializado de la regulación de las TIC algunas administraciones acertaron en poner el foco en cuestiones que tiene que ver con el despliegue de redes. Así como en cuestiones de espectro, por ejemplo, facilitando el acceso a mayor cantidad de espectro para mejorar la calidad de las redes, revisando políticas en cuanto al cobro al acceso por espectro. Y otra serie de medidas en relación a la compartición de infraestructura.
Una gran discusión que se ha generado en la región, en Argentina en particular, tiene que ver con la asequibilidad. De qué manera se procura que los sectores más postergados en la sociedad puedan acceder a la conectividad y allí hay que ser muy cuidadoso entre las medidas cortoplacistas para una situación de emergencia y las medidas estructurales para el mediano y largo plazo.
En general nuestra región tiene que hacer un gran esfuerzo por instalar políticas que estén basadas en evidencia, que estén basadas en la medición de indicadores y que no estén reñidas con las matemáticas. Hay visiones que son cortoplacistas, que pueden ser buenas durante un periodo de emergencia. Ese punto lo entendieron todos los actores del ecosistema digital: los gobiernos, los prestadores, los ciudadanos, los proveedores de tecnología. Creo que todos hicieron un esfuerzo importante para lograr que las redes, que los sistemas, continúen funcionando a pesar de los incrementos de demanda. En toda la región, la respuesta del ecosistema digital ha sido importante.
Ahora en la formulación de políticas de mediano y largo plazo, la región tiene que hacer un esfuerzo en medir indicadores, basarse en la evidencia para tomar decisiones que tengan sostenibilidad, porque si no al final del recorrido el corto plazo mata el desarrollo de mediano y largo plazo. Y ahí es donde no hay que pelearse con la matemática, como decía. Una cosa es discutir visiones de política pública y otra cosa es no reconocer los más elementales criterios e indicadores de la actividad económica.
Sintetizando, los reguladores de la región, superada esta etapa inicial de emergencia, podrían poner foco en aquellas políticas que tienen que ver con facilitar, promover el despliegue de redes, generar incentivos por la positiva para que la industria se desarrolle y continuar atendiendo el tema de la asequibilidad con políticas públicas sostenibles en el mediano y largo plazo, donde los Estados tienen un rol central. Con medidas sostenibles, que no terminen resultando perjudiciales para el desarrollo de la industria y el desarrollo de las redes, porque de lo contrario estaríamos matando a la gallina para comernos unos huevos.
¿Qué oportunidades presentan las TIC para ayudar a las economías de la región a progresar en la post-pandemia?
Ya están ayudando. Hemos vivido meses donde teníamos países con fronteras cerradas, con vuelos cerrados, hemos pasado momentos muy complejos, que a todos nos ha generado cierta zozobra. En es contexto las TIC han sido un gran apoyo, una gran herramienta para darle a este contexto de tanta angustia un viso de normalidad, para poder sostener la actividad y cierta normalidad.
Las TIC ayudaron a este proceso que se generó a partir de una situación de emergencia, que probablemente continúe con menor intensidad, pero va a permanecer en el tiempo. Algunas empresas ya están analizando continuar con el teletrabajo. En el ámbito de la educación superior, la educación universitaria, también va a haber un proceso de adaptación y de transformación de la mano de las herramientas que permite el acceso a internet.
Las TIC van a continuar con un mayor nivel de utilización en muchas actividades, tanto productivas como sociales. Eso es quizá en sí mismo una ayuda para que las sociedades puedan retornar a cierta normalidad. Pero también reconociendo que hay cierto valor en poder mantener y desarrollar algunas actividades a través de la tecnología, Internet y de los servicios digitales.
¿Qué sectores supone tendrán mejor adaptación al nuevo escenario global, cuánto influirán allí los servicios móviles?
El teletrabajo, no con las mismas características y modalidades de este periodo de emergencia, puede continuar desarrollándose. Quizá con algunas revisiones y mejoras para que esto se transforme en algo permanente y no en una herramienta de emergencia.
Lo que refería de la educación, creo que en la educación superior es posible sostener en el tiempo actividades digitales, on-line, virtuales, etc. Es mucho más difícil con la educación primaria y secundaria.
Y en el ámbito productivo, podríamos poner más foco en la cuestión de la productividad y la competitividad a través de la incorporación y el uso de las tecnologías.